El primer abrazo

Ayer di el primer abrazo de la que va a ser una buena cantidad de ellos durante el día de hoy.

Me marcho de mi empresa. Una nueva oportunidad ha surgido y voy a arriesgar y probar suerte.

Araceli hoy no iría a trabajar, así que me despedí de ella ayer, la abracé y la llamé Araceline Dion por última vez, al menos como su jefe.

Hoy es mi último día después de tres años de mucho trabajo, muchos cafés, miles de informes y miles de horas dedicadas a intentar dar lo mejor de mí mismo y aprender a ser mejor; mejor empleado, mejor jefe y mejor persona.

El tópico de «echaré de menos a la gente» hoy es más cierto que nunca, aunque creo que siempre lo es, porque en el fondo, para mí, todo se reduce a las personas. Lo demás sale solo.

Mi balance y resumen es bueno, y nada más que bueno. He estado a gusto, tranquilo y feliz durante estos 3 años.

Me imagino la mezcla entre alegría y nostalgia que voy a sentir a lo largo del día: Mientras llego y le pregunto a Cristina si tiene alguna galleta para darme, porque ya llego con hambre. Mientras le digo de coña a Rocío, como todos los días, que deje de quejarse, que acorta la vida. Mientras me acerco a Seguros a ver a mis ex-compañeros y me quedo un rato con Merce diciéndole cualquier barbaridad sexual, que ella encaja con maestría como si fuera un maricón más. Mientras le pido un último café solo largo de café a la chica del Viena Capellanes y el chico rubio de noséquédepartamento que siempre está a esas horas por la cafetería me busca la mirada, como todos los días. Mientras leo y envío el trillón de correos diarios. Mientras veo el puesto de Amparo vacío y lamento que esté pachucha y no vaya a poder despedirme de ella. Mientras Miguel me mande correos desquiciado porque se me ha escapado algún agente a descansar sin darme cuenta y se le caen los netos. Mientras meriende con Inma y la vea comerse su potito de Hacendado o su pulguita de jamón y luego nos pongamos a mirar frikadas por el móvil. Mientras me desconecto de mi puesto y salgo por última vez por esa puerta…

Voy a echar mucho de menos a todos y les estoy muy agradecido, por todo lo que me han enseñado acerca del trabajo, la gente y de mí mismo.

Después de esto me espera una semana de merecidas vacaciones y luego empieza un nuevo episodio.

GRACIAS por todo, compañeros. 🙂

4 comentarios en “El primer abrazo”

  1. No me mencionas, supongo que por la emoción y el despiste 😉
    Simplemente darte las gracias por tu ayuda, tu paciencia y comprensión en este medio año largo que hemos coincidido.
    Jefe: muchas gracias por todo.
    Miguel.

  2. Me ha encantado lo de la pulguita. Te ha faltado poner lo de los días de ansia-yisus con sus dos donuts y/o sus dos-tres minibocadillos esos de lomo. O lo de asaltar la máquina y aparecer con el regazo lleno cual mofletes de hámster xD
    Se te echa de menos, hamija. Y a la gusana también.

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